The Story Of An Artist

Daniel Johnston

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54,00

Munster

Daniel Johnston

The Story Of An Artist


SKU: MR CD 298  | 

Box set de 6 CDs/6 LPs en edición limitada que reúne los primeros temas de uno de los autores más brillantes de las últimas tres décadas. Incluye los seis álbumes grabados por Daniel entre 1980 y 1983 y publicados originalmente sólo en cassette, presentados en sus carpetas individuales y acompañados de un libreto de 64 páginas con ilustraciones de Daniel y un amplio texto a cargo del periodista Everett True. Descubre por qué gente como Tom Waits, Beck, Matt Groening, Kurt Cobain, Johnny Depp, Eddie Vedder y tantos otros consideraron estas grabaciones tan especiales.

Box set de 6 CDs/6 LPs en edición limitada que reúne los primeros temas de uno de los autores más brillantes de las últimas tres décadas. Incluye los seis álbumes grabados por Daniel entre 1980 y 1983 y publicados originalmente sólo en cassette, presentados en sus carpetas individuales y acompañados de un libreto de 64 páginas con ilustraciones de Daniel y un amplio texto a cargo del periodista Everett True. Descubre por qué gente como Tom Waits, Beck, Matt Groening, Kurt Cobain, Johnny Depp, Eddie Vedder y tantos otros consideraron estas grabaciones tan especiales. Cuando conocí a Daniel en 1985, él ya tenía cierta fama. Había estado regalando sus cassettes grabadas en casa durante meses y sus actuaciones atraían a un público muy entusiasta. Incluso había salido en la MTV. Las cintas eran su tarjeta de visita y sabía cómo usarlas, parecía como si todas las bandas de Austin tuviesen copias de Hi, How Are You, Yip/Jump Music, Retired Boxer, Respect y Continued Story. A medida que crecía el interés, también lo hacía la necesidad de seguir haciendo y moviendo las cintas. Llegó al punto en que se gastaba la mayor parte de su sueldo de McDonald’s en cintas vírgenes, así que empecé a hablar con él sobre cómo, por lo menos, recuperar gastos. Cuando Daniel se fue de Austin un año después, las cosas habían cambiado notablemente. Yo había conseguido distribución nacional para las cassettes, pero Daniel no se encontraba bien y no quería seguir en la industria musical. Me dio un par de cintas que yo no había escuchado y luego tiró la mayoría de sus posesiones en un vertedero. Cuando me enteré de lo del vertedero y me puse a buscar en él como un loco, tratando de recuperar cualquier cinta que pudiese encontrar, era demasiado tarde. Nunca sabremos qué se perdió en aquel vertedero. Las dos cintas inéditas que me había dado eran More Songs Of Pain y Don’t Be Scared (irónicamente con el título escrito como Don’ Be Scarred). No se parecían a nada que yo hubiera escuchado antes. Grabadas en la semi-privacidad del sótano de la casa de sus padres a principios de los 80, antes de que se mudase a Texas, el sonido era ligeramente mejor que el de las cintas que yo estaba distribuyendo, y el material era tan bueno que supe que se merecía un lugar entre los grandes autores de canciones. Para mí eran y son obras maestras completas. Durante los siguientes meses la salud de Daniel empezó a mejorar. Aunque seguía apartado de la música, me animaba a publicar más cassettes en Stress Records. Cabía la posibilidad de que Daniel no volviese a trabajar, y yo creía que se merecía vivir del trabajo que había realizado hasta entonces. Me habló de Songs Of Pain y de cómo había sido concebido como su primer álbum. Pude conseguir prestada una cinta que le había dado a Kathy McCarty, del grupo Glass Eye, titulada The Joker – resultó ser una de varias versiones de la cinta de Songs Of Pain que había regalado a sus amigos de West Virginia antes de mudarse a Austin. Supe que tenía que ser el primero de los nuevos lanzamientos, así que empecé a distribuir Songs Of Pain en 1987. Unos meses más tarde me dejaron otra cinta que Daniel había dado a uno de sus amigos. Esto condujo al lanzamiento de The What Of Whom. En 1988 edité More Songs Of Pain y en 1989 Don’t Be Scared. En 1990 Daniel encontró unas cintas debajo de su cama (!) tituladas The Lost Recordings, y éstas fueron editadas en 1991. Los lanzamientos solían coincidir con giras de Sonic Youth porque eran el grupo más influyente de la época, y me gustaba tener una cinta que darles cada vez que pasaban por Austin. La mayoría de las primeras grabaciones de Daniel fueron hechas en un Sanyo jam box de 59 dólares, usando las cintas más baratas que podía conseguir. El término lo-fi todavía no era conocido y yo no pensé en ningún momento en la baja fidelidad de estas grabaciones. Lo importante era la música y la historia de un artista. Songs Of Pain, More Songs Of Pain, The What Of Whom, Don’t Be Scared y The Lost Recordings cuentan la historia de ese artista. Puede que fuesen sólo cassettes, pero Daniel tenía los derechos sobre sus canciones y estos lanzamientos propiciaron que se editasen más temas suyos, y finalmente que otros grupos hicieran versiones de sus temas. Estoy muy agradecido porque Munster Records haya decidido recopilar en un box set las grabaciones de West Virginia de Daniel. Espero que lo disfrutes. Jeff Tartakov
Stress Records

Uno de los autores más brillantes de las últimas tres décadas. Descubre por qué gente como Tom Waits, Beck, Matt Groening, Kurt Cobain, Johnny Depp, Eddie Vedder y tantos otros consideraron sus grabaciones tan especiales.
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Box set de 6 CDs/6 LPs en edición limitada que reúne los primeros temas de uno de los autores más brillantes de las últimas tres décadas. Incluye los seis álbumes grabados por Daniel entre 1980 y 1983 y publicados originalmente sólo en cassette, presentados en sus carpetas individuales y acompañados de un libreto de 64 páginas con ilustraciones de Daniel y un amplio texto a cargo del periodista Everett True. Descubre por qué gente como Tom Waits, Beck, Matt Groening, Kurt Cobain, Johnny Depp, Eddie Vedder y tantos otros consideraron estas grabaciones tan especiales. Cuando conocí a Daniel en 1985, él ya tenía cierta fama. Había estado regalando sus cassettes grabadas en casa durante meses y sus actuaciones atraían a un público muy entusiasta. Incluso había salido en la MTV. Las cintas eran su tarjeta de visita y sabía cómo usarlas, parecía como si todas las bandas de Austin tuviesen copias de Hi, How Are You, Yip/Jump Music, Retired Boxer, Respect y Continued Story. A medida que crecía el interés, también lo hacía la necesidad de seguir haciendo y moviendo las cintas. Llegó al punto en que se gastaba la mayor parte de su sueldo de McDonald’s en cintas vírgenes, así que empecé a hablar con él sobre cómo, por lo menos, recuperar gastos. Cuando Daniel se fue de Austin un año después, las cosas habían cambiado notablemente. Yo había conseguido distribución nacional para las cassettes, pero Daniel no se encontraba bien y no quería seguir en la industria musical. Me dio un par de cintas que yo no había escuchado y luego tiró la mayoría de sus posesiones en un vertedero. Cuando me enteré de lo del vertedero y me puse a buscar en él como un loco, tratando de recuperar cualquier cinta que pudiese encontrar, era demasiado tarde. Nunca sabremos qué se perdió en aquel vertedero. Las dos cintas inéditas que me había dado eran More Songs Of Pain y Don’t Be Scared (irónicamente con el título escrito como Don’ Be Scarred). No se parecían a nada que yo hubiera escuchado antes. Grabadas en la semi-privacidad del sótano de la casa de sus padres a principios de los 80, antes de que se mudase a Texas, el sonido era ligeramente mejor que el de las cintas que yo estaba distribuyendo, y el material era tan bueno que supe que se merecía un lugar entre los grandes autores de canciones. Para mí eran y son obras maestras completas. Durante los siguientes meses la salud de Daniel empezó a mejorar. Aunque seguía apartado de la música, me animaba a publicar más cassettes en Stress Records. Cabía la posibilidad de que Daniel no volviese a trabajar, y yo creía que se merecía vivir del trabajo que había realizado hasta entonces. Me habló de Songs Of Pain y de cómo había sido concebido como su primer álbum. Pude conseguir prestada una cinta que le había dado a Kathy McCarty, del grupo Glass Eye, titulada The Joker – resultó ser una de varias versiones de la cinta de Songs Of Pain que había regalado a sus amigos de West Virginia antes de mudarse a Austin. Supe que tenía que ser el primero de los nuevos lanzamientos, así que empecé a distribuir Songs Of Pain en 1987. Unos meses más tarde me dejaron otra cinta que Daniel había dado a uno de sus amigos. Esto condujo al lanzamiento de The What Of Whom. En 1988 edité More Songs Of Pain y en 1989 Don’t Be Scared. En 1990 Daniel encontró unas cintas debajo de su cama (!) tituladas The Lost Recordings, y éstas fueron editadas en 1991. Los lanzamientos solían coincidir con giras de Sonic Youth porque eran el grupo más influyente de la época, y me gustaba tener una cinta que darles cada vez que pasaban por Austin. La mayoría de las primeras grabaciones de Daniel fueron hechas en un Sanyo jam box de 59 dólares, usando las cintas más baratas que podía conseguir. El término lo-fi todavía no era conocido y yo no pensé en ningún momento en la baja fidelidad de estas grabaciones. Lo importante era la música y la historia de un artista. Songs Of Pain, More Songs Of Pain, The What Of Whom, Don’t Be Scared y The Lost Recordings cuentan la historia de ese artista. Puede que fuesen sólo cassettes, pero Daniel tenía los derechos sobre sus canciones y estos lanzamientos propiciaron que se editasen más temas suyos, y finalmente que otros grupos hicieran versiones de sus temas. Estoy muy agradecido porque Munster Records haya decidido recopilar en un box set las grabaciones de West Virginia de Daniel. Espero que lo disfrutes. Jeff Tartakov
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Box set de 6 CDs/6 LPs en edición limitada que reúne los primeros temas de uno de los autores más brillantes de las últimas tres décadas. Incluye los seis álbumes grabados por Daniel entre 1980 y 1983 y publicados originalmente sólo en cassette, presentados en sus carpetas individuales y acompañados de un libreto de 64 páginas con ilustraciones de Daniel y un amplio texto a cargo del periodista Everett True. Descubre por qué gente como Tom Waits, Beck, Matt Groening, Kurt Cobain, Johnny Depp, Eddie Vedder y tantos otros consideraron estas grabaciones tan especiales. Cuando conocí a Daniel en 1985, él ya tenía cierta fama. Había estado regalando sus cassettes grabadas en casa durante meses y sus actuaciones atraían a un público muy entusiasta. Incluso había salido en la MTV. Las cintas eran su tarjeta de visita y sabía cómo usarlas, parecía como si todas las bandas de Austin tuviesen copias de Hi, How Are You, Yip/Jump Music, Retired Boxer, Respect y Continued Story. A medida que crecía el interés, también lo hacía la necesidad de seguir haciendo y moviendo las cintas. Llegó al punto en que se gastaba la mayor parte de su sueldo de McDonald’s en cintas vírgenes, así que empecé a hablar con él sobre cómo, por lo menos, recuperar gastos. Cuando Daniel se fue de Austin un año después, las cosas habían cambiado notablemente. Yo había conseguido distribución nacional para las cassettes, pero Daniel no se encontraba bien y no quería seguir en la industria musical. Me dio un par de cintas que yo no había escuchado y luego tiró la mayoría de sus posesiones en un vertedero. Cuando me enteré de lo del vertedero y me puse a buscar en él como un loco, tratando de recuperar cualquier cinta que pudiese encontrar, era demasiado tarde. Nunca sabremos qué se perdió en aquel vertedero. Las dos cintas inéditas que me había dado eran More Songs Of Pain y Don’t Be Scared (irónicamente con el título escrito como Don’ Be Scarred). No se parecían a nada que yo hubiera escuchado antes. Grabadas en la semi-privacidad del sótano de la casa de sus padres a principios de los 80, antes de que se mudase a Texas, el sonido era ligeramente mejor que el de las cintas que yo estaba distribuyendo, y el material era tan bueno que supe que se merecía un lugar entre los grandes autores de canciones. Para mí eran y son obras maestras completas. Durante los siguientes meses la salud de Daniel empezó a mejorar. Aunque seguía apartado de la música, me animaba a publicar más cassettes en Stress Records. Cabía la posibilidad de que Daniel no volviese a trabajar, y yo creía que se merecía vivir del trabajo que había realizado hasta entonces. Me habló de Songs Of Pain y de cómo había sido concebido como su primer álbum. Pude conseguir prestada una cinta que le había dado a Kathy McCarty, del grupo Glass Eye, titulada The Joker – resultó ser una de varias versiones de la cinta de Songs Of Pain que había regalado a sus amigos de West Virginia antes de mudarse a Austin. Supe que tenía que ser el primero de los nuevos lanzamientos, así que empecé a distribuir Songs Of Pain en 1987. Unos meses más tarde me dejaron otra cinta que Daniel había dado a uno de sus amigos. Esto condujo al lanzamiento de The What Of Whom. En 1988 edité More Songs Of Pain y en 1989 Don’t Be Scared. En 1990 Daniel encontró unas cintas debajo de su cama (!) tituladas The Lost Recordings, y éstas fueron editadas en 1991. Los lanzamientos solían coincidir con giras de Sonic Youth porque eran el grupo más influyente de la época, y me gustaba tener una cinta que darles cada vez que pasaban por Austin. La mayoría de las primeras grabaciones de Daniel fueron hechas en un Sanyo jam box de 59 dólares, usando las cintas más baratas que podía conseguir. El término lo-fi todavía no era conocido y yo no pensé en ningún momento en la baja fidelidad de estas grabaciones. Lo importante era la música y la historia de un artista. Songs Of Pain, More Songs Of Pain, The What Of Whom, Don’t Be Scared y The Lost Recordings cuentan la historia de ese artista. Puede que fuesen sólo cassettes, pero Daniel tenía los derechos sobre sus canciones y estos lanzamientos propiciaron que se editasen más temas suyos, y finalmente que otros grupos hicieran versiones de sus temas. Estoy muy agradecido porque Munster Records haya decidido recopilar en un box set las grabaciones de West Virginia de Daniel. Espero que lo disfrutes. Jeff Tartakov
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Box set de 6 CDs/6 LPs en edición limitada que reúne los primeros temas de uno de los autores más brillantes de las últimas tres décadas. Incluye los seis álbumes grabados por Daniel entre 1980 y 1983 y publicados originalmente sólo en cassette, presentados en sus carpetas individuales y acompañados de un libreto de 64 páginas con ilustraciones de Daniel y un amplio texto a cargo del periodista Everett True. Descubre por qué gente como Tom Waits, Beck, Matt Groening, Kurt Cobain, Johnny Depp, Eddie Vedder y tantos otros consideraron estas grabaciones tan especiales. Cuando conocí a Daniel en 1985, él ya tenía cierta fama. Había estado regalando sus cassettes grabadas en casa durante meses y sus actuaciones atraían a un público muy entusiasta. Incluso había salido en la MTV. Las cintas eran su tarjeta de visita y sabía cómo usarlas, parecía como si todas las bandas de Austin tuviesen copias de Hi, How Are You, Yip/Jump Music, Retired Boxer, Respect y Continued Story. A medida que crecía el interés, también lo hacía la necesidad de seguir haciendo y moviendo las cintas. Llegó al punto en que se gastaba la mayor parte de su sueldo de McDonald’s en cintas vírgenes, así que empecé a hablar con él sobre cómo, por lo menos, recuperar gastos. Cuando Daniel se fue de Austin un año después, las cosas habían cambiado notablemente. Yo había conseguido distribución nacional para las cassettes, pero Daniel no se encontraba bien y no quería seguir en la industria musical. Me dio un par de cintas que yo no había escuchado y luego tiró la mayoría de sus posesiones en un vertedero. Cuando me enteré de lo del vertedero y me puse a buscar en él como un loco, tratando de recuperar cualquier cinta que pudiese encontrar, era demasiado tarde. Nunca sabremos qué se perdió en aquel vertedero. Las dos cintas inéditas que me había dado eran More Songs Of Pain y Don’t Be Scared (irónicamente con el título escrito como Don’ Be Scarred). No se parecían a nada que yo hubiera escuchado antes. Grabadas en la semi-privacidad del sótano de la casa de sus padres a principios de los 80, antes de que se mudase a Texas, el sonido era ligeramente mejor que el de las cintas que yo estaba distribuyendo, y el material era tan bueno que supe que se merecía un lugar entre los grandes autores de canciones. Para mí eran y son obras maestras completas. Durante los siguientes meses la salud de Daniel empezó a mejorar. Aunque seguía apartado de la música, me animaba a publicar más cassettes en Stress Records. Cabía la posibilidad de que Daniel no volviese a trabajar, y yo creía que se merecía vivir del trabajo que había realizado hasta entonces. Me habló de Songs Of Pain y de cómo había sido concebido como su primer álbum. Pude conseguir prestada una cinta que le había dado a Kathy McCarty, del grupo Glass Eye, titulada The Joker – resultó ser una de varias versiones de la cinta de Songs Of Pain que había regalado a sus amigos de West Virginia antes de mudarse a Austin. Supe que tenía que ser el primero de los nuevos lanzamientos, así que empecé a distribuir Songs Of Pain en 1987. Unos meses más tarde me dejaron otra cinta que Daniel había dado a uno de sus amigos. Esto condujo al lanzamiento de The What Of Whom. En 1988 edité More Songs Of Pain y en 1989 Don’t Be Scared. En 1990 Daniel encontró unas cintas debajo de su cama (!) tituladas The Lost Recordings, y éstas fueron editadas en 1991. Los lanzamientos solían coincidir con giras de Sonic Youth porque eran el grupo más influyente de la época, y me gustaba tener una cinta que darles cada vez que pasaban por Austin. La mayoría de las primeras grabaciones de Daniel fueron hechas en un Sanyo jam box de 59 dólares, usando las cintas más baratas que podía conseguir. El término lo-fi todavía no era conocido y yo no pensé en ningún momento en la baja fidelidad de estas grabaciones. Lo importante era la música y la historia de un artista. Songs Of Pain, More Songs Of Pain, The What Of Whom, Don’t Be Scared y The Lost Recordings cuentan la historia de ese artista. Puede que fuesen sólo cassettes, pero Daniel tenía los derechos sobre sus canciones y estos lanzamientos propiciaron que se editasen más temas suyos, y finalmente que otros grupos hicieran versiones de sus temas. Estoy muy agradecido porque Munster Records haya decidido recopilar en un box set las grabaciones de West Virginia de Daniel. Espero que lo disfrutes. Jeff Tartakov
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