“Libre – Free” es el ya legendario segundo álbum del efímero grupo Brooklyn Sounds y resulta incluso mejor que su disco de debut, mostrando un sonido más maduro y pulido, probablemente debido a haber tocado más frecuentemente en vivo presentando su primer LP.

Brooklyn Sounds formaba parte de un puñado de bandas de salsa seudoamateur de la escena independiente que se estaba curtiendo por los distritos de Nueva York a comienzos de los 70, a pesar del poco apoyo y exposición que les brindaba la industria de la música latina mainstream desde los sellos dominantes como Fania, Mericana, Cotique y Alegre. Como muchos otros, Brooklyn Sounds tuvo un momento de brillo efímero que se apagó poco después, muriendo como una flor rodeada de ruinas de bloques de apartamentos calcinados en los barrios de su ciudad.

Aunque la banda solo materializó dos LPs y un par de singles en su escasa media década de existencia, y nunca logró realmente salir más allá del “circuito cuchifrito” en los tres estados del área, Nueva York, New Jersey y Connecticut, su música se difundió gradualmente, logrando que sus grabaciones fueran muy buscadas en todo el mundo a finales de los 90.

En contraste con el primer album, “Libre – Free” es más animado y rítmico, con menos canciones lentas y arreglos más rotundos y creativos, repleto de salsa dura de Nueva York propulsada por el sonido crudo de los trombones, un piano juguetón y percusiones demoledoras en un primer plano. Entre las canciones más destacables tenemos el irresistible himno ‘Libre soy’ y ‘Ha llegado el momento’, con un guiño al comienzo a ‘Moliendo café’, convirtiéndose ambas con los años en grandes clásicos de las pistas de baile. Otro tema demoledor es el medio tiempo ‘Guaguancó tropical’, popular en Colombia desde los 70.

Una mezcla perfecta de swing caribeño y actitud del barrio, el disco demuestra que Brooklyn tiene ¡sabor y salsa!