Exile On Bo Street

Bo Street Runners

Exile On Bo Street

Agotado

16,00

Munster

Bo Street Runners

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SKU: MR 365  | 

Los Bo Street Runners practicaron el R&B en todas sus vertientes – desde el blues duro y arenoso al suave y sofisticado soul. Varios músicos de primer nivel pasaron por la formación a lo largo de los tres años que duró el grupo, algunos de ellos alcanzando la fama posteriormente, y aunque ninguno de sus discos triunfó en las listas de éxitos, siempre contaron con entusiastas seguidores allá donde tocaron. 50 años después de su separación, sus brillantes grabaciones de 1964-66, reunidas aquí en vinilo por primera vez, siguen sonando incandescentes e invitando al baile.

John Dominic y Gary Thomas empezaron a tocar juntos en el combo de jazz Group Indigo, en Harrow, al noroeste de Londres, antes de formar un grupo de R&B llamado The Roadrunners en 1963. En el verano de ese año ya habían conseguido actuar de forma permanente en el hotel Railway de Harrow con una formación que consistía en John a las voces y armónica, Gary a la guitarra, Dick Connor al bajo (sustituido poco después por Dave Cameron), Bob O’Brien al teclado y Nigel “Hutch” Hutchinson a la batería. Tras descubrir que ya había otros Roadrunners por ahí, de manera ingeniosa tomaron el nombre del primer cuerpo de policía de Londres, los Bow Street Runners, y le dieron un giro a lo Bo Diddley – resultado: The Bo Street Runners. Celebraron este espléndido nuevo nombre con un tema igualmente espléndido, ‘Bo Street Runner’. A principios de 1964 el grupo entró en el estudio de RG Jones en Morden para grabar un EP de cuatro canciones, que se publicó en el sello del estudio, Oak, en una edición limitada de solo 99 copias. Mientras tanto, la madre de Dave Cameron los sorprendió a todos apuntándolos al programa Ready Steady Win, un concurso de grupos beat organizado por los productores del programa de televisión Ready Steady Go! Participaron en la competición televisada durante el verano y fueron elegidos ganadores. El premio incluía mil libras para gastar en instrumentos musicales, un contrato con una editorial y agencia promotora, y un acuerdo con Decca. El sello publicó el single de debut del grupo poco después, con una nueva versión de ‘Bo Street Runners’ y otro tema original del grupo, ‘Tell Me’. Al volverse el grupo profesional se produjo un cambio en la formación. Bob O’Brien y Hutch Hutchinson se marcharon, y Roy “Fingers” Fry y Glyn Helson Thomas se unieron a los teclados y batería respectivamente. Fry era un músico excepcional con un toque jazz, influenciado por Jimmy Smith, y en el paso de 1964 a 1965 los Runners adoptaron una dirección con aires soul y jazz, añadiendo al saxofonista Dave Quincy. Aunque su single de debut había vendido 20.000 copias, Decca decidió no renovar el contrato y el grupo se fue a Columbia para su siguiente lanzamiento. Producido por Mickie Most y publicado en febrero de 1965, el disco emparejó dos canciones de James Brown con arreglos con sabor a Georgie Fame, ‘Tell Me What You’re Gonna Do’ y ‘And I Do Just What I Want’. El single fracasó y los tres miembros nuevos – Quincy, Fry y Thomas – dejaron la formación. Tom Hinckley se convirtió en el nuevo teclista y poco después apareció un nuevo batería, un adolescente espigado de nombre Mick Fleetwood que hasta entonces había tocado en The Cheynes. El primer single con esa formación fue un tema pegadizo con un potente groove titulado ‘Baby Never Say Goodbye’. Publicado en 1965, sonó mucho en las emisoras piratas pero se vio perjudicado por una huelga en la fábrica de discos que interrumpió la distribución. Decepcionado por la suerte del single, Mick Fleetwood volvió a los Cheynes y fue sustituido por Alan Turner. Todavía peor fue el abandono del vocalista John Dominic, que también decidió dejarlo. Por suerte los Runners encontraron un sustituto muy capaz en Mike Patto, a quien habían visto cantar con unos teloneros en Norfolk. Patto trajo consigo un nuevo batería, Barry Wilson. Esta fue la formación que grabó el último single de los Bo Street Runners en la primavera de 1966. ‘Drive My Car’, de los Beatles, era un tema apropiado para el sonido del grupo, al cual acompañó la plácida y jazzística ‘So Very Woman’. El disco no encontró la respuesta del público y en octubre el grupo se separó. Sin embargo, unos meses más tarde, Patto llamó a varios ex Runners para que lo acompañasen en el estudio al grabar ‘Love’, un magnífico tema con sabor a soul que se publicó en diciembre como cara B de su single en solitario, ‘Can’t Stop Talking About My Baby’. Mike Patto continuaría con una exitosa trayectoria con formaciones como Timebox, Patto, Spooky Tooth y Boxer antes de fallecer prematuramente en 1979. Tim Hinkley se dio a conocer con el grupo de prog rock Jody Grind, mientras que muchos de los otros Bo Street Runners han seguido tocando música a diferentes niveles, incluyendo, no hace falta decirlo, Mick Fleetwood. Aquí, sin embargo, celebramos sus primeros años y la época dorada de 1964-66 de los Bo Street Runners, héroes del R&B británico.

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Los Bo Street Runners practicaron el R&B en todas sus vertientes – desde el blues duro y arenoso al suave y sofisticado soul. Varios músicos de primer nivel pasaron por la formación a lo largo de los tres años que duró el grupo, algunos de ellos alcanzando la fama posteriormente, y aunque ninguno de sus discos triunfó en las listas de éxitos, siempre contaron con entusiastas seguidores allá donde tocaron. 50 años después de su separación, sus brillantes grabaciones de 1964-66, reunidas aquí en vinilo por primera vez, siguen sonando incandescentes e invitando al baile.

John Dominic y Gary Thomas empezaron a tocar juntos en el combo de jazz Group Indigo, en Harrow, al noroeste de Londres, antes de formar un grupo de R&B llamado The Roadrunners en 1963. En el verano de ese año ya habían conseguido actuar de forma permanente en el hotel Railway de Harrow con una formación que consistía en John a las voces y armónica, Gary a la guitarra, Dick Connor al bajo (sustituido poco después por Dave Cameron), Bob O’Brien al teclado y Nigel “Hutch” Hutchinson a la batería. Tras descubrir que ya había otros Roadrunners por ahí, de manera ingeniosa tomaron el nombre del primer cuerpo de policía de Londres, los Bow Street Runners, y le dieron un giro a lo Bo Diddley – resultado: The Bo Street Runners. Celebraron este espléndido nuevo nombre con un tema igualmente espléndido, ‘Bo Street Runner’. A principios de 1964 el grupo entró en el estudio de RG Jones en Morden para grabar un EP de cuatro canciones, que se publicó en el sello del estudio, Oak, en una edición limitada de solo 99 copias. Mientras tanto, la madre de Dave Cameron los sorprendió a todos apuntándolos al programa Ready Steady Win, un concurso de grupos beat organizado por los productores del programa de televisión Ready Steady Go! Participaron en la competición televisada durante el verano y fueron elegidos ganadores. El premio incluía mil libras para gastar en instrumentos musicales, un contrato con una editorial y agencia promotora, y un acuerdo con Decca. El sello publicó el single de debut del grupo poco después, con una nueva versión de ‘Bo Street Runners’ y otro tema original del grupo, ‘Tell Me’. Al volverse el grupo profesional se produjo un cambio en la formación. Bob O’Brien y Hutch Hutchinson se marcharon, y Roy “Fingers” Fry y Glyn Helson Thomas se unieron a los teclados y batería respectivamente. Fry era un músico excepcional con un toque jazz, influenciado por Jimmy Smith, y en el paso de 1964 a 1965 los Runners adoptaron una dirección con aires soul y jazz, añadiendo al saxofonista Dave Quincy. Aunque su single de debut había vendido 20.000 copias, Decca decidió no renovar el contrato y el grupo se fue a Columbia para su siguiente lanzamiento. Producido por Mickie Most y publicado en febrero de 1965, el disco emparejó dos canciones de James Brown con arreglos con sabor a Georgie Fame, ‘Tell Me What You’re Gonna Do’ y ‘And I Do Just What I Want’. El single fracasó y los tres miembros nuevos – Quincy, Fry y Thomas – dejaron la formación. Tom Hinckley se convirtió en el nuevo teclista y poco después apareció un nuevo batería, un adolescente espigado de nombre Mick Fleetwood que hasta entonces había tocado en The Cheynes. El primer single con esa formación fue un tema pegadizo con un potente groove titulado ‘Baby Never Say Goodbye’. Publicado en 1965, sonó mucho en las emisoras piratas pero se vio perjudicado por una huelga en la fábrica de discos que interrumpió la distribución. Decepcionado por la suerte del single, Mick Fleetwood volvió a los Cheynes y fue sustituido por Alan Turner. Todavía peor fue el abandono del vocalista John Dominic, que también decidió dejarlo. Por suerte los Runners encontraron un sustituto muy capaz en Mike Patto, a quien habían visto cantar con unos teloneros en Norfolk. Patto trajo consigo un nuevo batería, Barry Wilson. Esta fue la formación que grabó el último single de los Bo Street Runners en la primavera de 1966. ‘Drive My Car’, de los Beatles, era un tema apropiado para el sonido del grupo, al cual acompañó la plácida y jazzística ‘So Very Woman’. El disco no encontró la respuesta del público y en octubre el grupo se separó. Sin embargo, unos meses más tarde, Patto llamó a varios ex Runners para que lo acompañasen en el estudio al grabar ‘Love’, un magnífico tema con sabor a soul que se publicó en diciembre como cara B de su single en solitario, ‘Can’t Stop Talking About My Baby’. Mike Patto continuaría con una exitosa trayectoria con formaciones como Timebox, Patto, Spooky Tooth y Boxer antes de fallecer prematuramente en 1979. Tim Hinkley se dio a conocer con el grupo de prog rock Jody Grind, mientras que muchos de los otros Bo Street Runners han seguido tocando música a diferentes niveles, incluyendo, no hace falta decirlo, Mick Fleetwood. Aquí, sin embargo, celebramos sus primeros años y la época dorada de 1964-66 de los Bo Street Runners, héroes del R&B británico.

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Los Bo Street Runners practicaron el R&B en todas sus vertientes – desde el blues duro y arenoso al suave y sofisticado soul. Varios músicos de primer nivel pasaron por la formación a lo largo de los tres años que duró el grupo, algunos de ellos alcanzando la fama posteriormente, y aunque ninguno de sus discos triunfó en las listas de éxitos, siempre contaron con entusiastas seguidores allá donde tocaron. 50 años después de su separación, sus brillantes grabaciones de 1964-66, reunidas aquí en vinilo por primera vez, siguen sonando incandescentes e invitando al baile.

John Dominic y Gary Thomas empezaron a tocar juntos en el combo de jazz Group Indigo, en Harrow, al noroeste de Londres, antes de formar un grupo de R&B llamado The Roadrunners en 1963. En el verano de ese año ya habían conseguido actuar de forma permanente en el hotel Railway de Harrow con una formación que consistía en John a las voces y armónica, Gary a la guitarra, Dick Connor al bajo (sustituido poco después por Dave Cameron), Bob O’Brien al teclado y Nigel “Hutch” Hutchinson a la batería. Tras descubrir que ya había otros Roadrunners por ahí, de manera ingeniosa tomaron el nombre del primer cuerpo de policía de Londres, los Bow Street Runners, y le dieron un giro a lo Bo Diddley – resultado: The Bo Street Runners. Celebraron este espléndido nuevo nombre con un tema igualmente espléndido, ‘Bo Street Runner’. A principios de 1964 el grupo entró en el estudio de RG Jones en Morden para grabar un EP de cuatro canciones, que se publicó en el sello del estudio, Oak, en una edición limitada de solo 99 copias. Mientras tanto, la madre de Dave Cameron los sorprendió a todos apuntándolos al programa Ready Steady Win, un concurso de grupos beat organizado por los productores del programa de televisión Ready Steady Go! Participaron en la competición televisada durante el verano y fueron elegidos ganadores. El premio incluía mil libras para gastar en instrumentos musicales, un contrato con una editorial y agencia promotora, y un acuerdo con Decca. El sello publicó el single de debut del grupo poco después, con una nueva versión de ‘Bo Street Runners’ y otro tema original del grupo, ‘Tell Me’. Al volverse el grupo profesional se produjo un cambio en la formación. Bob O’Brien y Hutch Hutchinson se marcharon, y Roy “Fingers” Fry y Glyn Helson Thomas se unieron a los teclados y batería respectivamente. Fry era un músico excepcional con un toque jazz, influenciado por Jimmy Smith, y en el paso de 1964 a 1965 los Runners adoptaron una dirección con aires soul y jazz, añadiendo al saxofonista Dave Quincy. Aunque su single de debut había vendido 20.000 copias, Decca decidió no renovar el contrato y el grupo se fue a Columbia para su siguiente lanzamiento. Producido por Mickie Most y publicado en febrero de 1965, el disco emparejó dos canciones de James Brown con arreglos con sabor a Georgie Fame, ‘Tell Me What You’re Gonna Do’ y ‘And I Do Just What I Want’. El single fracasó y los tres miembros nuevos – Quincy, Fry y Thomas – dejaron la formación. Tom Hinckley se convirtió en el nuevo teclista y poco después apareció un nuevo batería, un adolescente espigado de nombre Mick Fleetwood que hasta entonces había tocado en The Cheynes. El primer single con esa formación fue un tema pegadizo con un potente groove titulado ‘Baby Never Say Goodbye’. Publicado en 1965, sonó mucho en las emisoras piratas pero se vio perjudicado por una huelga en la fábrica de discos que interrumpió la distribución. Decepcionado por la suerte del single, Mick Fleetwood volvió a los Cheynes y fue sustituido por Alan Turner. Todavía peor fue el abandono del vocalista John Dominic, que también decidió dejarlo. Por suerte los Runners encontraron un sustituto muy capaz en Mike Patto, a quien habían visto cantar con unos teloneros en Norfolk. Patto trajo consigo un nuevo batería, Barry Wilson. Esta fue la formación que grabó el último single de los Bo Street Runners en la primavera de 1966. ‘Drive My Car’, de los Beatles, era un tema apropiado para el sonido del grupo, al cual acompañó la plácida y jazzística ‘So Very Woman’. El disco no encontró la respuesta del público y en octubre el grupo se separó. Sin embargo, unos meses más tarde, Patto llamó a varios ex Runners para que lo acompañasen en el estudio al grabar ‘Love’, un magnífico tema con sabor a soul que se publicó en diciembre como cara B de su single en solitario, ‘Can’t Stop Talking About My Baby’. Mike Patto continuaría con una exitosa trayectoria con formaciones como Timebox, Patto, Spooky Tooth y Boxer antes de fallecer prematuramente en 1979. Tim Hinkley se dio a conocer con el grupo de prog rock Jody Grind, mientras que muchos de los otros Bo Street Runners han seguido tocando música a diferentes niveles, incluyendo, no hace falta decirlo, Mick Fleetwood. Aquí, sin embargo, celebramos sus primeros años y la época dorada de 1964-66 de los Bo Street Runners, héroes del R&B británico.

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John Dominic y Gary Thomas empezaron a tocar juntos en el combo de jazz Group Indigo, en Harrow, al noroeste de Londres, antes de formar un grupo de R&B llamado The Roadrunners en 1963. En el verano de ese año ya habían conseguido actuar de forma permanente en el hotel Railway de Harrow con una formación que consistía en John a las voces y armónica, Gary a la guitarra, Dick Connor al bajo (sustituido poco después por Dave Cameron), Bob O’Brien al teclado y Nigel “Hutch” Hutchinson a la batería. Tras descubrir que ya había otros Roadrunners por ahí, de manera ingeniosa tomaron el nombre del primer cuerpo de policía de Londres, los Bow Street Runners, y le dieron un giro a lo Bo Diddley – resultado: The Bo Street Runners. Celebraron este espléndido nuevo nombre con un tema igualmente espléndido, ‘Bo Street Runner’. A principios de 1964 el grupo entró en el estudio de RG Jones en Morden para grabar un EP de cuatro canciones, que se publicó en el sello del estudio, Oak, en una edición limitada de solo 99 copias. Mientras tanto, la madre de Dave Cameron los sorprendió a todos apuntándolos al programa Ready Steady Win, un concurso de grupos beat organizado por los productores del programa de televisión Ready Steady Go! Participaron en la competición televisada durante el verano y fueron elegidos ganadores. El premio incluía mil libras para gastar en instrumentos musicales, un contrato con una editorial y agencia promotora, y un acuerdo con Decca. El sello publicó el single de debut del grupo poco después, con una nueva versión de ‘Bo Street Runners’ y otro tema original del grupo, ‘Tell Me’. Al volverse el grupo profesional se produjo un cambio en la formación. Bob O’Brien y Hutch Hutchinson se marcharon, y Roy “Fingers” Fry y Glyn Helson Thomas se unieron a los teclados y batería respectivamente. Fry era un músico excepcional con un toque jazz, influenciado por Jimmy Smith, y en el paso de 1964 a 1965 los Runners adoptaron una dirección con aires soul y jazz, añadiendo al saxofonista Dave Quincy. Aunque su single de debut había vendido 20.000 copias, Decca decidió no renovar el contrato y el grupo se fue a Columbia para su siguiente lanzamiento. Producido por Mickie Most y publicado en febrero de 1965, el disco emparejó dos canciones de James Brown con arreglos con sabor a Georgie Fame, ‘Tell Me What You’re Gonna Do’ y ‘And I Do Just What I Want’. El single fracasó y los tres miembros nuevos – Quincy, Fry y Thomas – dejaron la formación. Tom Hinckley se convirtió en el nuevo teclista y poco después apareció un nuevo batería, un adolescente espigado de nombre Mick Fleetwood que hasta entonces había tocado en The Cheynes. El primer single con esa formación fue un tema pegadizo con un potente groove titulado ‘Baby Never Say Goodbye’. Publicado en 1965, sonó mucho en las emisoras piratas pero se vio perjudicado por una huelga en la fábrica de discos que interrumpió la distribución. Decepcionado por la suerte del single, Mick Fleetwood volvió a los Cheynes y fue sustituido por Alan Turner. Todavía peor fue el abandono del vocalista John Dominic, que también decidió dejarlo. Por suerte los Runners encontraron un sustituto muy capaz en Mike Patto, a quien habían visto cantar con unos teloneros en Norfolk. Patto trajo consigo un nuevo batería, Barry Wilson. Esta fue la formación que grabó el último single de los Bo Street Runners en la primavera de 1966. ‘Drive My Car’, de los Beatles, era un tema apropiado para el sonido del grupo, al cual acompañó la plácida y jazzística ‘So Very Woman’. El disco no encontró la respuesta del público y en octubre el grupo se separó. Sin embargo, unos meses más tarde, Patto llamó a varios ex Runners para que lo acompañasen en el estudio al grabar ‘Love’, un magnífico tema con sabor a soul que se publicó en diciembre como cara B de su single en solitario, ‘Can’t Stop Talking About My Baby’. Mike Patto continuaría con una exitosa trayectoria con formaciones como Timebox, Patto, Spooky Tooth y Boxer antes de fallecer prematuramente en 1979. Tim Hinkley se dio a conocer con el grupo de prog rock Jody Grind, mientras que muchos de los otros Bo Street Runners han seguido tocando música a diferentes niveles, incluyendo, no hace falta decirlo, Mick Fleetwood. Aquí, sin embargo, celebramos sus primeros años y la época dorada de 1964-66 de los Bo Street Runners, héroes del R&B británico.

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